Para nuestra sorpresa, el día apareció estupendo, con un solazo muy majo, así que no hubo que preocuparse por la excursión que queríamos hacer y nos fuimos al parque Disney, que está un poco a tomar por el culo. Pero antes, el desayuno friki por excelencia, una caracola de chocolate y un Van Houten Cocoa, como Konata:

Aquí un mapa del parquecillo:

Y aquí la tenéis en grande

El parque está junto al Disneyland normal, y tiene más ambientación en plan películas, tipo Port Aventura pero en plan guay: costa mediterránea, selva azteca, Nueva York, etc. Nada más llegar nos encontramos con el Spring Carnival, un número musical sobre la primavera, muy chulo, lástima la gente que había delante.

Recorriendo el puerto mediterráneo llegamos a la Isla Misteriosa, donde nos montamos en una atracción de Viaje al Centro de la Tierra bastante chula, con caída al final donde descubrí que podía gritar. Había un río en medio donde podíamos ver el Nautilus y la entrada a una atracción de 20.000 Leguas de Viaje Submarino, así que para allá nos fuimos, era más tranqui, pero la sensación de estar debajo del agua estaba lograda.

Después de admirar el volcán que había en la zona un rato más nos fuimos al Mermaid Lagoon, ambientación de La Sirenita muy lograda, donde un muy bien caracterizado y yanki Príncipe Eric secuestró a Goiuri para huir de un grupo de japonesas hiperhormonada. Descubrimos que Eric era un fresco, Goiuri le dijo que su novio podía estar celoso y contestò que seguro que no, él estaba casado y no había problema, juas. Eso sí, el momento en que se la llevó del brazo delante de las japas, y las caras de odio/asombro de éstas, fue memorable. Lo siguiente fue ver un espectáculo sobre la película con una puesta en escena y unas marionetas acojonantes, impresionante.

De ahí pasamos al Lost River Delta, donde el resto se montó en una montaña rusa que a mi me echó para atrás al ver el letrero que decía que tenía un loop de 360º. Da igual que dijeran que era una mierda, el criterio de alguien que monta en el Dragon Khan deja de ser objetivo para mí. Comimos por la zona unos filetillos de pollo con arroz y ensalada por los que nos sangraron bastante, poco abundante, pero al menos estaba rico:

Y después tocaba Agrabah y el puerto árabe, con cosillas de Aladdin. Fuimos a otra atracción/espectáculo con magia y animación 3D que no estaba mal, y si nos hubiéramos dado cuenta que había aparatitos para traducir si querías, hubiera estado mejor; menos mal que se podía entender bastante bien.

Después regresamos al Lost River Delta, se nos había pasado una atracción de Indiana Jones, estuvo chula, pero no pude disfrutarla porque estaba pendiente de si había alguna caída, e incluso me mareé. La siguiente zona a visitar era Port Discovery, un lugar en plan retrofuturista con submarinos y un muelle. Los demás se fueron a lo que parecía otra montaña rusa mientras yo me quedaba experimentando con la reflex de Zumito; al final resultó ser un simulador a puerta cerrada sobre el interior de una tormente y salieron mojados, jejeje.

Seguimos nuestro camino y entramos en el American Waterfront, con una réplica muy chula del SS Columbia. El resto de la zona era una recreación del Nueva York de los años 20, con coches y edificios de época muy chulos.

En esa misma zona fue donde me robaron la garganta, gracias a la casa del terror del lugar. Yo, como iba flipando con todo, no me fijé en que la azafata decía muchas veces “erebetaa”, o elevator(ascensor), así que cuando subimos a la altura de 5 pisos y nos dejaron caer me cagué. Descubrí que puedo gritar como una auténtica nena, sólo necesito dos caídas libres, madre mía! Salí que me temblaban las piernas, pero la experiencia estuvo bien, eso sí, no quise repetir.

Como había un espectáculo de luz y fuegos artificiales a partir de las 8, volvimos a la zona de la Sirenita a hacer tiempo, y descubrimos un laberinto con localizaciones de la peli muy chulo.

El espectáculo de luz era en el lago del puerto mediterráneo, y consistía en chorros de agua y una especie de pájaro de fuego mecánico que lanzaba bolas de fuego por las alas, me encantó; los fuegos artificiales fueron normalillos, pero aún así fueron bonitos.

Después de eso nos largamos pitando antes de que cerraran el parque y el tren se petara de gente, pero antes, una paradita para cenar en un sitio donde hacían unas hamburguesas que no estaban mal:

Un comentario para “Japón en 15 días: Tokyo Disney Sea”

Deja un comentario

Notificarme los nuevos comentarios por correo electrónico. Tambien puedes suscribirte sin comentar.

Encuentranos en twitter